Hola a todos.
No me gustan los
remakes. Algunos de ellos están bien hechos. Aportan algo a la película original.
Sin embargo, otros
remakes son innecesarios. Destruyen los recuerdos que teníamos de la película original. Los bastardizan, por así decirlo. Ahora, se sabe que se va a rodar un
remake de una gran película.
Y esa película no es otra que
Mary Poppins. Lo leí en Facebook. Confieso que, en un primer momento, pensé que era una broma. Luego, escuché la noticia en el Informativo de Telecinco. Y ya no supe qué pensar. Me dio terror.
¿Qué puede pasar ahora?
Recuerdo
Mary Poppins con gran cariño. Era una película alegre y llena de vitalidad. Con unas canciones muy pegadizas...Las actuaciones eran todas sublimes. ¡Hasta la de los niños!
Estaba muy bien ambientada en el Londres de finales del siglo XIX. Cierto es que no es la primera película en la que se los actores de carne y hueso interactúan con personajes animados. Ahí tenemos
Saludos amigos.
Pero aquellas escenas estaban muy bien realizadas. Mary era un ser mágico. No era sólo la niñera de los pequeños Jane y Michael. Se dedicaba a ellos por completo.
Michael y Jane tenían un padre y una madre. Pero éstos parecían haberse desentendido de ellos.
Estaban solos. Necesitaban sentirse queridos. Y es aquí donde aparece Mary. Ella es la encargada de abrirle los ojos a los padres.
Unos padres que estaban demasiado pendientes de otros asuntos y que habían descuidado a sus hijos. Cierto era que Michael y Jane vivían bien. Pero les faltaba el amor de sus padres. El sentirse querido por ellos.
Por suerte, la historia termina bien. Y no pienso entrar en spoilers. Es una historia preciosa. Única...¿Se merece un
remake? No lo creo.
Es perfecta en su conjunto. Así lo pienso.
Ahora, circula el rumor de que el encargado de hacer el
remake va a ser Tim Burton. ¿Cómo? Tim Burton es un gran director de cine. Pero no creo que sea la mejor persona para hacer un
remake. ¿Os acordáis de cuándo rodó el
remake de
El Planeta de los Simios?
La película en sí es buena. Sin embargo, no tenía el sello típicamente burtoniano. Y había desaparecido el aire filosófico que impregnaba la película original. Lo siento.
Pero no quiero un
remake de un gran clásico. Los
remakes deben de hacerse bien. Deben de aportar algo más a la película original. Si no es así, entonces que no se hagan.
Mary Poppins no ha quedado en absoluto obsoleta. Niños que se sienten poco queridos por sus padres están ahí. En la vida real...
La alegría que impregnaba la película nos la contagia a nosotros. Está perfecta tal y como está.
Dejen a esta gran película en paz. Que se olviden de esa idea. Nunca pasará de moda. Sigue siendo igual de buena que cuando se estrenó hace cincuenta y un años.